Consejos para conducir de manera segura en invierno
Reduce la velocidad. Es más difícil controlar o detener tu vehículo en una superficie resbaladiza o cubierta de nieve. En la calle, aumenta tu distancia de seguimiento lo suficiente como para tener tiempo suficiente para detenerte ante los vehículos que van delante tuyo.
Qué hacer en caso de emergencia
Si estás detenido o estancado en el clima invernal, concéntrate en ti mismo, tus pasajeros, tu automóvil y tus alrededores.
- Permanece en el vehículo y no te esfuerces demasiado.
- Permite que tu automóvil sea visto. Coloca marcadores brillantes en la antena o en las ventanas y mantén encendida la luz interior.
- Ten cuidado con el envenenamiento por monóxido de carbono. Asegúrate de que el tubo de escape esté libre de nieve y pon el automóvil en marcha esporádicamente, sólo el tiempo suficiente para mantenerte caliente. No mantengas en marcha el vehículo durante largos periodos de tiempo con las ventanillas subidas o en un espacio cerrado.
Prepara tu vehículo
Luces. Revisa los faros delanteros, las luces de freno, las señales de giro, las luces intermitentes de emergencia y las luces interiores.
Limpiaparabrisas. Se puede consumir rápidamente una gran cantidad de líquido limpiaparabrisas en una sola tormenta de nieve. Asegúrate de que el depósito de tu vehículo esté lleno de líquido “para invierno” de alta calidad con descongelador antes de que llegue el clima invernal. Asegúrate de que los descongeladores y todos los limpiaparabrisas funcionen y reemplaza las escobillas desgastadas. Considera instalar limpiaparabrisas de invierno de alta resistencia si vives en un área donde hay mucha nieve y hielo.
Sistema de enfriamiento. Asegúrate de tener suficiente refrigerante en tu vehículo y que cumpla con las especificaciones del fabricante. Verifica el sistema de enfriamiento para detectar fugas, prueba el refrigerante y drena o reemplaza el refrigerante viejo. También puedes visitar a tu mecánico para una puesta a punto antes del invierno.
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Antes de salir
Abastece tu vehículo. Lleva en tu vehículo cosas que te permitan realizar las tareas habituales de conducción en invierno y lo que puedas necesitar en caso de emergencia, incluyendo:
- una pala de nieve, una escoba y un raspador de hielo;
- material abrasivo (arena o arena para gatos), en caso de que tu vehículo quede atascado en la nieve;
- cables puente, linternas y dispositivos de advertencia (bengalas y marcadores de emergencia);
- mantas para protegerte del frío; y
- un teléfono celular y cargador, agua, comida y cualquier medicamento necesario.
Llena el tanque o carga la batería. Mantén el tanque de gasolina lo más lleno siempre que sea posible o la batería cargada si es un vehículo eléctrico.
Planifica tu ruta. Consulta los informes meteorológicos y de tráfico locales antes de salir. Si las carreteras no están en buenas condiciones, considera posponer los viajes no esenciales hasta que las carreteras estén despejadas. Si tienes que salir, asegúrate de estar preparado en caso de que sufras retrasos durante el viaje. Si vas a realizar un viaje largo cuando se pronostica clima invernal, considera salir temprano o cambiar tu salida para evitar estar en la carretera durante lo peor de la tormenta. Familiarízate con las direcciones y los mapas antes de partir, incluso si usas un GPS, e informa a los demás sobre tu ruta y la hora prevista de llegada. En viajes más largos, planifica tiempo suficiente para detenerte a estirarte, comer algo, revisar tu teléfono y cambiar de conductor o descansar si te sientes somnoliento.
Este artículo apareció originalmente en el boletín informativo El Ojo del Águila del Gobierno del Condado de Eagle.