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¿Un nuevo proyecto de ley de Colorado enfrentará adecuadamente la crisis del narcótico sintético conocido como fentanilo?

El proyecto de ley enfrenta diferentes niveles de apoyo y críticas de las partes interesadas.

Ali Longwell
Traducido por Edgar Arroyo
Un nuevo proyecto de ley de la Cámara de Representantes de Colorado busca abordar la creciente crisis de fentanilo en el estado.
David Zalubowski/AP

A medida que la crisis del fentanilo continúa creciendo en Colorado, los legisladores estatales intentan iniciar nuevas medidas para rendir cuentas y prevención con la presentación de un nuevo proyecto de ley.

Esto se produce cuando el fentanilo continúa escaso y elevando el nivel de amenaza de sobredosis no solo en todo el estado sino también en el condado de Eagle. GRANITE, el Equipo de Interdicción de Narcóticos de Gore Range, continúa viendo grandes volúmenes de la sustancia en sus incautaciones a lo largo del corredor I-70. En 2021, el equipo incautó 70 libras, exclusivamente en píldoras de oxicodona M30 falsificadas, a lo largo de la extensión del condado de Eagle.

Según el sargento de GRANITE John Chiodo, el equipo ha incautado alrededor de 8 libras de fentanilo en lo que va de 2022.



El Proyecto de Ley 1326 de la Cámara de Representantes fue presentado por primera vez a fines de marzo por un grupo bipartidista de legisladores. Desde entonces, el proyecto de ley ha sido aprobado tanto por el Comité Judicial y de Asignaciones de la Cámara como por una segunda lectura en la Cámara el viernes 22 de abril.

En una discusión del proyecto de ley en toda la Cámara el viernes por la tarde, el presidente de la Cámara de Representantes, Alec Garnett, un demócrata de Denver y principal patrocinador del proyecto de ley, presentó el proyecto de ley como un “enfoque integral para ayudar a Colorado a enfrentar la crisis del fentanilo que está afectando a nuestro estado en este momento.”

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Si bien el proyecto de ley contiene una serie de métodos para abordar la crisis, incluida la educación, la reducción de daños y las medidas de prevención, gran parte del debate, la discusión y las enmiendas en la Cámara y sus comités se han centrado en las sanciones por posesión de fentanilo.

El proyecto de ley, tal como está escrito actualmente, hace que la “posesión ilegal de cualquier material, compuesto, mezcla o preparación que pese más de 4 gramos y contenga cualquier cantidad de fentanilo, carfentanal o un análogo” sea un delito grave de drogas de nivel 4.

Este texto actual fue aprobado el viernes en una orden especial de segunda lectura, eliminando enmiendas del Comité Judicial que habría hecho que la posesión a sabiendas de “más de 1 gramo y no más de cuatro gramos” de una sustancia con fentanilo o un compuesto de fentanilo fuera un delito grave.

Según la DEA, alrededor de 2 miligramos de fentanilo se considera una “dosis potencialmente letal”.

La enmienda del Comité Judicial siguió a las críticas de las autoridades encargadas de hacer cumplir la ley de que el margen de 4 gramos no era suficiente. El gobernador Jared Polis también ha defendido cargos por delitos graves en cualquier nivel de posesión de fentanilo.

Una síntesis de los alguaciles del condado de Colorado y la Asociación de Policía de Colorado declaró que si bien los grupos (incluida también la Orden Fraternal de Policía de Colorado) estaban “unidos en su llamado a tomar medidas fuertes y audaces contra la posesión de cualquier cantidad de fentanilo”, sintieron que el proyecto de ley necesitaba ser “significativamente fortalecido”.

La postura de la coalición continúa afirmando que “la posesión de fentanilo sin importar la cantidad” debe considerarse un delito grave, algo que se discutió durante el debate del proyecto de ley frente a la Cámara en pleno el viernes. Una de las razones dadas es que “el delito menor por simple posesión no es un elemento de disuasión lo suficientemente fuerte como para eliminar al fentanilo de nuestras calles”.

El puesto también contempla los requisitos mínimos de sentencia, una reevaluación del Buen Samaritano y las opciones de inmunidad, así como consideraciones adicionales para la financiación y los recursos.

El proyecto de ley de la Cámara también incluye una serie de otras medidas para abordar la posesión, así como aumentar la reducción de daños y los recursos educativos en torno al fentanilo. Esto incluye (pero no se limita a):

• Hacerlo delito grave de drogas de nivel 1 por poseer equipo de fabricación de píldoras o tabletas, utilizado para mezclar fentanilo con otras drogas

• Convertirlo en delito grave de drogas de nivel 1 si una persona distribuyó o vendió ilegalmente un compuesto que contiene fentanilo, y una persona muere como resultado de su uso

• Requerir, para ciertos delitos, la asignación ordenada por la corte en un centro de tratamiento residencial

• Requerir que los programas de correcciones comunitarias evalúen a las personas para ciertos síntomas de abstinencia y tratamiento con asistencia médica

• $20 millones para el fondo de compra a granel de antagonistas de opiáceos del estado, que incluye Narcan

• $300,000 para la compra y distribución de tiras de fentanilo

• $6 millones para un fondo en efectivo del programa de subvenciones para la reducción de daños

• Un requisito para que el departamento de salud pública y medio ambiente inicie una campaña de prevención y educación sobre el fentanilo en todo el estado

• Permiso para la junta de educación del distrito escolar (o el equivalente de una escuela privada) para adquirir y mantener tiras reactivas de opiáceos en los terrenos de la escuela

El proyecto de ley, que contiene las medidas anteriores y más, aún enfrentará un debate y un discurso significativos antes de que tenga el potencial de convertirse en ley. Enfrentará más debate y discurso frente a la Cámara en pleno el lunes 25 de abril.

¿Es adecuada la ley?

En 2021, GRANITE incautó 70 libras de fentanilo a lo largo del corredor I-70 que atraviesa el condado de Eagle. El fentanilo se encontró exclusivamente en píldoras falsificadas de oxicodona M30, como las que se muestran arriba.
GRANITE/Foto cortesía

Si bien los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley han presionado por sanciones más estrictas, no todos creen que el proyecto de ley abordará adecuadamente la crisis actual. Específicamente, el proyecto de ley ha enfrentado algunas críticas por parte de especialistas y defensores de la reducción de daños.

Maggie Seldeen, fundadora de High Rockies Harm Reduction, dijo que sentía que el proyecto de ley no sería efectivo en absoluto para reducir los riesgos del fentanilo.

“El fentanilo ya es ilegal y un delito grave con 4 gramos (que definitivamente es mucho fentanilo) y estas leyes no han impedido que se apodere del mundo de las drogas”, dijo Seldeen. “La despenalización es la única forma de regular las drogas, excepto que se vuelve confuso cuando consideramos que el fentanilo, la heroína y la metanfetamina son drogas que se usan regularmente en la medicina”.

Seldeen continuó diciendo que debido a que el fentanilo puede estar oculto en una serie de sustancias, “con todas las drogas callejeras generalmente contaminadas con fentanilo en estos días”, agrega cierta complejidad.

“Simplemente no cuadra, pero tenemos herramientas y recursos que realmente pueden salvar vidas, como las tiras reactivas de Narcan y fentanilo. El enfoque debe estar en la educación, la prevención y la reparación de nuestros sistemas de tratamiento, no en la criminalización costosa”, dijo Seldeen. “Con este proyecto de ley, los usuarios de drogas recreativas pierden, las víctimas de sobredosis pierden, los contribuyentes pierden”.

Si bien Seldeen reconoció y agradeció la inclusión de medidas de tratamiento y reducción de daños en el lenguaje del proyecto de ley, también dijo que “el enfoque en el tratamiento es completamente inútil si nuestros programas de tratamiento continúan siendo mal administrados y en gran medida inaccesibles”.

“Necesitamos centrarnos en cambiar sistemáticamente nuestros sistemas de salud conductual que han fallado a tanta gente”, agregó.

No solo eso, sino que como el proyecto de ley contempla fondos para medidas de reducción de daños como las tiras reactivas de fentanilo y Narcan, así como otras opciones de tratamiento, estas cosas ya son posibles, dijo Seldeen.

“Las leyes en Colorado ya permiten la educación y el uso de Narcan en las escuelas, que las cárceles administren tiras reactivas de naloxona y fentanilo a los reclusos al ser liberados, que las cárceles inicien a las personas en tratamiento asistido por medicamentos mientras están encarcelados”, dijo, y luego agregó que “el estigma es lo único que impide que las escuelas y las cárceles utilicen estos servicios y estrategias de prevención. El Fondo de Liquidación de Opioides y otros recursos gubernamentales están ofreciendo más fondos que nunca para los servicios de reducción de daños, por lo que es interesante que este proyecto de ley elija centrarse en eso también”.

Para Seldeen, el enfoque del estado debe ser expandir el acceso a las drogas, así como despenalizar y regular las drogas para “mitigar los elementos criminales del abuso de sustancias”.

“En general, no creo que criminalizar los problemas de salud mental, que son absolutamente el abuso de sustancias y la adicción, sea una respuesta efectiva para detener estos problemas”, dijo Seldeen. “Habiendo visto el mundo del abuso de sustancias desde todos los lados como activista, adicto o amigo y familiar afectado, necesitamos compasión, no criminalización”.

Para Heidi McCollum, fiscal de 5° Distrito Judicial, que abarca los condados de Clear Creek, Eagle, Lake y Summit, las leyes de posesión son solo “una pieza del rompecabezas para abordar la crisis del fentanilo”.

“Presentar cargos a alguien por posesión puede resultar en una participación adicional de la comunidad para abordar otros problemas con los que el acusado puede estar luchando”, dijo McCollum. “Entonces, mientras un acusado se encuentra en el sistema judicial penal, en algunos casos se puede ordenar a los socios comunitarios que ayuden a dar al acusado otros servicios, como tratamiento de salud mental, vivienda o empleo, por nombrar solo algunos”.

Todo este rompecabezas también incluye la pieza de reducción de daños, que McCollum dijo que era “una necesidad absoluta para abordar el problema”, y agregó que las tiras de prueba de fentanilo y la distribución de Narcan, aunque no toda la pieza, ayudarán a salvar vidas.

McCollum agregó que la intención de la legislatura, como este proyecto de ley actual, es más compleja que simplemente reducir la cantidad de fentanilo en las comunidades.

“El fentanilo ya está aquí y la cantidad necesaria para causar múltiples muertes es tan pequeña que es imposible ‘reducir’ su existencia”, dijo. “La intención o el propósito de cualquier legislación sobre el uso, la posesión o la distribución de fentanilo es disminuir el número de víctimas y brindar sistemas de apoyo para abordar la adicción y la salud mental”.

Aun así, McCollum no está convencida de que el lenguaje actual del proyecto de ley de la Cámara tenga el impacto deseado.

“El lenguaje específico hará que sea extremadamente difícil o imposible procesar los cargos de posesión de fentanilo. Si este lenguaje permanece en el proyecto de ley, anticipo que muy pocas oficinas de fiscales en todo el estado presentarán estos cargos”, dijo McCollum. “La pregunta entonces será, sin una confesión del acusado, ¿cómo prueba que alguien sabía o debería haber sabido que la droga que poseía contenía fentanilo?”.

Independientemente del futuro del proyecto de ley, es probable que la lucha para abordar la crisis del fentanilo continúe gracias a los esfuerzos de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, médicos, educadores, especialistas en reducción de daños, legislaturas y más.

“Siento que pase lo que pase en el Capitolio, el fentanilo seguirá estando aquí y nosotros, los activistas que trabajan sobre el terreno, lucharemos para crear una mayor conciencia y acceso a servicios y suministros de reducción de daños que salvan vidas”. dijo Seldeen.


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